Opiniones encontradas, ¿será realmente el futuro el teletrabajo?
A propósito de las polémicas noticias en relación al regreso parcial o definitivo a las oficinas, entre ellas el gigante Twitter, ahora liderado por Elon Musk, en el que desafìa un comportamiento que se había venido haciendo cada vez más definitivo en lo relacionado a la permanencia remota o parcial en las oficinas; y es que el multimillonario Musk ha terminado con algo que parecía inamovible en Twitter: el teletrabajo.
Según la fuente de información Bloomberg, Musk envió este miércoles 9 de noviembre 2022 un email dirigido a sus empleados en el que les anunciaba que el trabajo remoto ya no estaba permitido, salvo excepciones que serán cuidadosamente revisadas, este mensaje viene a propósito de los cambios económicos futuros que se avecinan, y que según él mismo: “ el camino por delante es “arduo” y que requerirá “un trabajo intenso” en caso de querer obtener éxito”.
Este tema lo he estado reflexionando y, en definitiva, es polémico, pues no es menos cierto que grandes multinacionales han incorporado el teletrabajo como una de las modalidades que forman parte de beneficios atractivos de adquisición y retención de talento humano, es por ello, que los mismo directivos del “gigante Twitter” han abandonado la compañía en las últimas horas como muestra de lo que parece un descontento con la políticas de transformación radical que ha asumido la nueva administración.
Dicho eso, es esta reflexión la que me lleva a compartir con ustedes una hipótesis y es que veo con cautela la posibilidad que estas decisiones de vuelta al “pasado” sean reconsideradas, pues en el mismo sector inmobiliario corporativo se está incrementando la nueva tendencia del coliving + coworking y así los modelos arquitectónicos de las nuevas edificaciones.
Esta tendencia es muy ambiciosa y posee importantes promotores dentro del mundo corporativo y laboral. De hecho, la encuesta “El surgimiento del lugar de trabajo híbrido”, elaborado por Cisco, muestra que el escenario post-covid es la puerta de entrada al mercado laboral con el uso más enfático de modelos mixtos, en los que no todo será home office, ni tampoco se trabajará totalmente de manera presencial, ya que indica que 6 de cada 10 personas, combinarán ambas modalidades, en donde se espera que dos o más días por semana, desempeñen sus funciones desde su hogar y el resto en la oficina.
Las nuevas estructuras arquitectónicas se están tomando muy en serio el coliving como un concepto basado en compartir espacios y experiencias en el ámbito profesional, pero aplicado a la vida personal. Por lo que, además de ser un fenómeno residencial de nueva implantación, es también un concepto de vida. Una alternativa inmobiliaria para que los más jóvenes puedan tener acceso a una vivienda en circunstancias diferentes a la habitual.
A partir de este concepto, los vecinos de una zona no solo compartirán espacios comunes, sino también intercambiarán proyectos basados en la socialización a nivel personal. Un concepto, en definitiva, muy similar al coworking pero, en este caso, adaptado al plano más personal.
Sin lugar a dudas, ambos conceptos -coworking y coliving- son una reacción directa a un cambio en la estructura del mercado en la que las nuevas generaciones, tienen una visión más autónoma en su forma de vivir y trabajar, basada en la imperiosa necesidad de resolver temas de movilidad y desplazamiento en las grandes ciudades y en el buscar una independencia.
Es por esto que me atrevo a predecir que en los próximos años, las fronteras entre vivir, trabajar e incluso entretener, empezarán a diluirse a mayor velocidad, abriendo paso a la integración del coworking y coliving.
Vayamos más allá y pensemos en nuestra naturaleza como seres humanos, es decir definitivamente somos más proclives a coexistir de lo que pensamos, pues el sentido de convivencia y colaboración está presente en nuestra naturaleza más primaria, por lo que no es de extrañarse que lejos de decir coworking y coliving, en un futuro los llamemos “cohabitat”.